La mayoría de mujeres tenemos celulitis. Sólo por ser mujeres tenemos más probabilidades de sufrirla (en todos los sentidos de la palabra…)

Pero los hombres no tienen celulitis. ¿Y eso por qué?

Las mujeres tenemos la grasa de las piernas distribuida en compartimientos rectangulares. En cambio los hombres tienen compartimientos en forma de rombos.

Gracias a esa distribución en rombos la circulación no se afecta. Y este es el origen de la celulitis: la circulación.

Esto es la que hace que los excesos de toxinas (o la basura del cuerpo) se elimine de forma eficiente.

Si este sistema no funciona, la grasa se acumula, la piel se deforma y aparece la típica «piel de naranja».

Mientras más grasa, más problemas de circulación porque los vasos quedan apretados por la grasa (lo puedes ver bien en la foto siguiente:

En los hombres esto no ocurre porque los rombos ofrecen más resistencia a la deformación y por tanto, aunque podrían tener problemas de circulación, no tendrán celulitis. 

Como no podemos hacer que los compartimientos rectangulares se conviertan en romboidales, lo único que se puede hacer es mejorar la circulación. Mujeres que aun no han desarrollado celulitis además de la alimentación saludable, la hidratación y el deporte, poddrían hacer presoterapia preventiva. Las que ya tienen celulitis tendrán que pasar a tratamientos un poco más intensos como la carboxiterapia, el HIFU, la radiofrecuencia. Mejor si se combinan entre ellas y se hace también presoterapia. 

La celulitis no tiene cura pero se puede mejorar.